4 ingredientes para el éxito de una Identidad Visual

Lo creas o no, diseñar una identidad visual y cocinar una deliciosa comida tienen más en común de lo que crees. En ambos casos, hay que combinar diferentes ingredientes para crear una experiencia emocionante y memorable.

Una identidad visual requiere combinar diferentes ingredientes para crear una experiencia emocionante y memorable.

Al igual que con la comida, la selección y preparación de los ingredientes de tu identidad visual puede variar enormemente en función de la cultura y el contexto. A algunas marcas les gustan los sabores conocidos y fiables, mientras que otras experimentan con especias extranjeras o combinaciones extrañas. Algunas marcas necesitan preparaciones elaboradas, mientras que otras se conforman con soluciones sencillas y eficaces. Dominar cómo y cuándo combinar estos ingredientes es cuestión de práctica, método e intuición. Pero también la espontaneidad y el juego.

La mayoría de proyectos de branding comienzan con cuatro ingredientes principales:

  • Diseño del logotipo

  • Tipo de letra

  • Paleta de colores

  • Elementos gráficos

A continuación descubrirás brevemente cómo abordar cada uno de estos ingredientes y cómo los combinarlos:

1. Diseño del logotipo

Normalmente se suele comenzar con el diseñar el logotipo, el icono principal y la marca denominativa. El objetivo principal de estos activos es sintetizar la marca (y todo lo que representa) en una forma reconocible. Se ve como una marca sugerente que te atrae hacia el concepto de la identidad visual, y bueno... sus muchos sabores.

Algunos logotipos pueden ser más descriptivos; otros, más evocadores. Pueden ayudarte a situar la marca en un sector o a describir sus servicios. Los logotipos también pueden ser un símbolo que desencadena una historia de marca más significativa. Sea cual sea el enfoque que adoptes, el diseño del logotipo será un ingrediente esencial al que siempre puedes volver para que la marca se sienta como en casa.

2. Paleta de colores

Las paletas de colores son todo un conjunto de ingredientes por sí mismas. Como tal, una paleta de colores te proporcionará todos los matices y aromas de una marca.

Una paleta de colores reducida puede proporcionar una identidad sencilla, reconocible y coherente, lo que es estupendo para las marcas pequeñas que están empezando. Sin embargo, las paletas de colores limitadas pueden volverse rápidamente planas, predecibles o aburridas después de un tiempo.

Por otro lado, una paleta de colores más completa puede añadir riqueza, complejidad e interés a una identidad visual, lo que resulta ideal para marcas grandes con narrativas más complejas. Sin embargo, demasiados colores pueden volverse rápidamente desordenados o abrumadores si se ejecutan mal después del traspaso. Así que juzgamos caso por caso.

Al igual que los platos de una comida completa, los colores también tienen un lugar y un orden determinados en una identidad visual. Por eso, debes ser consciente de asignar a cada color un papel y un momento para entrar en juego. Así, por ejemplo, los colores que utilices para la cubierta corporativa de los inversores de una marca pueden no ser tan variados como para el material de marketing de la misma marca.

3. Tipografía

La tipografía es esencial para realzar el sabor del texto de una marca. El estilo de los tipos de letra elegidos ayuda a definir si el tono de voz de una marca es dulce, agrio o quizás una combinación divertida de ambos.

Al elegir la tipografía de la marca, pregúntate si los tipos de letra seleccionados harán que el texto resulte más accesible. ¿conocedor? ¿Amable? ¿Tecnológico? ¿elegante? ¿Grande? Si necesitas ayuda para definir el tono y el estado de ánimo de un tipo de letra, ten en cuenta lo siguiente:

  • Historia - El origen y el uso del tipo de letra en el pasado.

  • Contexto - El significado y el uso del tipo de letra en la actualidad.

  • Estilo - Formas y gestos comunes del tipo de letra.

  • Función - El rendimiento general del tipo de letra.

Sean cuales sean las consideraciones que guíen tus elecciones tipográficas, puedes aplicar un razonamiento similar a los demás elementos de la marca. Esto dará como resultado un aspecto más armonioso y coherente que tenga sentido con la narrativa de la marca.

4. Elementos gráficos

Por último, los elementos gráficos son como los aderezos o condimentos de la marca. Una vez definidos los componentes principales de la marca, se puede empezar a realzar o complementar la narrativa de la marca mediante diversos tratamientos. Pueden ser formas, patrones, pegatinas, garabatos, texturas, subrayados, símbolos, filtros, etc.

Los elementos gráficos pueden convertirse en un complemento fundamental de la identidad visual de una marca. También es una oportunidad para experimentar y ser creativo. Ten en cuenta que estos elementos se utilizan para mejorar o complementar otros elementos de la marca, en lugar de enmascarar el sabor débil de una marca.

Héctor Lorenzo

Diseñador Gráfico Freelance cuyo objetivo es ayudar a empresas y personas a crear un futuro a través del diseño 🚀

https://www.hectorgrafico.com
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